El Teresiano Juvenil choca ante un gran Formac Villarrubia (1-3)

“A veces hay que tropezar para volver a ponerse de pie”. Es una máxima que enseña que el camino no suele ser fácil y se puede complicar de vez en cuando…

El otro día, ante el Formac Villarrubia, el camino se complicó, pero ¿quién nos dijo que iba a ser fácil?

Era un partido en lo más alto de la tabla. Nos visitaba el líder y nosotros mostramos las credenciales de seguirles a tan sólo un puesto de la tabla clasificatoria. Primero contra segundo, de esos partidos que gusta ver.

Por ese motivo, la entrada en el Félix Barrero volvió a ser buena, los aficionados siguen al equipo de Nico y Fer y son un reclamo suficiente, para planificar una interesante tarde de fútbol sea cuando sea.

El Teresiano comenzó con Jorge, Iván, Samuel, Marco, Ormeño, Redondo, Javichu, Jorgito, Nacho, Tomás y Jabochi…Un equipazo en ciernes.

Antes de continuar escribiendo queremos contar que quizá el resultado, aunque parezca justo y contundente, pueda llevar a equívocos, porque la igualdad de las plantillas y el devenir del encuentro podrían haber ofrecido, perfectamente, otro resultado diferente. ¡Ya lo dirá el discurrir de la liga!

El Teresiano salió con sus jugadores muy concentrados en lo que hacían, teniendo la posesión siempre, tal y como había ocurrido en los partidos anteriores.

Poco a poco, el peso de la responsabilidad fue pesando y como si de una salsa se tratase, nuestro juego se fue espesando y haciéndose un poco más turbio.

Cuando intentábamos jugar el balón desde abajo, en una de esas salidas tan características de nuestro equipo, perdimos el balón con tan mala suerte que el balón le cayó a los pies de Aaron Párraga, que con una calidad infinita regateó a Jorge, cedió el balón a Alonso y éste estableció el 0-1 en el minuto 33.

Como era de esperar el gol cayó como una auténtica jarra de agua fría a nuestros jugadores, pues no era, lo mirásemos por donde lo mirásemos, merecido…

A veces, las malas noticias no llegan solas, y tan sólo dos minutos después, en otra pérdida de balón, un pase por encima de nuestros centrales , le llegó nuevamente a Alonso que sólo contra Jorge estableció el 0-2.

Un castigo demasiado injusto. Habíamos recibido dos goles en menos de tres minutos y lo que teníamos delante era un “miura” desbocado, que había estudiado muy bien a nuestro equipo y nos desbarataban cualquier intento de remontada.

En los momentos malos suelen aparecer los jugadores valientes, y en Malagón Javichu quiso tomar las riendas del Teresiano. En un pase en el que arriesgó un poco más de lo habitual, el balón fue robado otra vez por Párraga y otra vez su ejecución fue perfecta; le pasó el balón a Alonso que con una tranquilidad pasmosa consiguió el 0-3 y su particular “hat trick”

SEGUNDO TIEMPO

Evidentemente después de la charla del descanso, el Teresiano salió a morder y a intentar, al menos sacar la identidad que habíamos perdido en los primeros 45 minutos.

Y así, en el minuto 8 de la segunda parte Tomás Ruiz recibió un balón, un tanto escorado, pero con el suficiente ángulo para que, una vez más, mostrase su calidad elevando al marcador el 1-3.

Parecía que el partido se encauzaba un poco, pero el Formac Villarrubia se mostró muy rocoso y después del gol llegó en otras dos ocasiones con muchísimo peligro. Jorge estuvo muy valiente, para salvarnos de esos dos goles que habrían supuesto, sin duda, el final del partido.

Como es natural, el Teresiano se lanzó al ataque, pero hay días que están marcados a fuego en el calendario con un sentido negativo y el sábado no era nuestro día.

Samuel lo intentó desde lejos, pero no encontró portería. No era nuestro partido.

Además, tuvimos mala suerte con las lesiones y tanto Redondo como Iván se lesionaron ¡Porca Miseria!

Con el marcador de 1-3 terminó el partido, con la sensación de que el Villarrubia es un gran equipo y también con el pensamiento que quizá podríamos haber hecho más…La liga es muy larga y hay que seguir peleando cada semana.

Mañana sábado, jugamos en Daimiel ante otro equipazo. Estoy seguro que, otra vez, daremos lo mejor de nosotros mismos.

¡Vamos Teresiano!